Resulta muy raro leer un libro de autoayuda. El hecho es que no he pasado del tercer capitulo. Por suerte no me ha costado nada y no puedo decir que me sienta estafado.

En la presentación te prometen que serás el rey del mambo (sin maracas o con ellas) si obedeces al autor con la misma fe que pondrías en la diatriba sobre Dios es Cristo. La decepción inicial llega en las tres primeras páginas cuando lees que lo prometido son, por este orden, dinero, mujeres y una buena casa. Inútil decir que, en mi caso, tengo suficiente dinero para llevar una vida tranquila, no hay ninguna mujer que me interese más que la que comparte conmigo penas y alegrías desde hace cuarenta y cuatro años y mi casa es lo suficientemente grande y bonita como para que no aspire a mejorarla.

El secreto que se nos promete es que pensar en positivo atrae lo positivo y al revés. O sea, la invocación a unos memes caprichosos. Donde se pasa muchos pueblos es al afirmar que todo el universo se coloca en nuestra dirección, cual punta de la lanza de Longinos, en el mismo instante en que colocamos nuestro pensamiento en la dirección adecuada. Eso si que es antropocéntrico y no el que tanto se critica en el judeo-cristianismo.

*

Es parte indisoluble de la naturaleza de la forma provenir de otra, no siendo jamás la definitiva. En su interior habitan tanto la afirmación de la precedente como su negación.

Trasladando este concepto del arte a la vida humana se hace bueno el hecho -hoy de dominio público- de que podemos reescribir nuestros genes a lo largo de nuestra vida, dependiendo del uso que hagamos de ella. Los interruptores geneticos existen pero tenemos en nuestras manos la posibilidad de no accionarlos. Para resumir: no hay destinos fatales salvo por nuestra propia mano.

*

Hay un enigma en la vida y obra de Velázquez en el que veo que, de cuantos han tratado de interpretar al artista, al menos que yo sepa, sólo ha caído Ortega. Es el siguiente: si el genio sevillano-portugués fue llevado muy joven a la corte, en el séquito del Conde-Duque, para hacer el retrato del rey dada su fama de gran retratista, ¿dónde están los retratos que debió hacer en Sevilla para granjearse tal fama? Aquí lo dejo por hoy.